Desolación y el nada. Eso es lo que pasa la mayoría de veces cuando te decepcionas, porque te fallan, porque te humillan, porque te rechazan.
Quien dijo que en medio de una tempestad no se pueda sonreír y seguir luchando y si, caer, pero renacer de las cenizas pues la mayoría de nosotros tiene un ave fénix en su interior.
El ser humano es mucho más duro de lo que piensa y el que no lo es no existe, se va,abandona y se deja morir perdiendo así la batalla.
Yo se que no he nacido para eso, para no luchar, poco a poco mi piel se ha vuelto dura y aunque si, a veces los envites de la vida me dan fuerte en el pecho y me dejan unos largos días dolida, al final crece de nuevo la piel, se recomponen mis arterias, y mi corazón vuelve a latir a un ritmo relativamente normal.
En fin, tendremos que luchar, tendremos que sangrar, tendremos que celebrar las victorias y aprender de las derrotas, pero nunca caer y caer al fondo, pues hay muchas manos amigas que te dejan tocar suelo, y si no.......
lunes, 28 de febrero de 2011
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